Cómo se hizo. Le he puesto algo de Funk y Jazz, suena Azymuth, Opolopo, Roy Ayers, Roy Hargrove, Mos Def, Jimmy Smith, Art Blakey, o Cannonball Adderley, entre otros.
Cuando termino la jornada me doy un paseo por el hotel, que tiene algo de Titanic, y por la noche de El resplandor.
Con Silvia Blanco, asistente de dirección, siempre pendiente de que no me faltase de nada para que el mural progresara adecuadamente. Ha sido un placer trabajar rodeado de amabilidad. Desde aquí mi agradecimiento a ella y a todos los profesionales que componen el Ibiza Gran Hotel .
El regalo más grande que puedo imaginar es que alguien mío me recoja en el aeropuerto. Ahí está Nacho Filoso esperándome en la zona de quererse. Golpe de amistad. [Sevilla, 4.4.2012]
La técnica es la misma que la del último mural en Mallorca, Variaciones sobre tema andaluz, sobre un único cristal con la pintura cara a la pared para que la composición haga sombra y a la vez quede protegida. Desde el punto de vista del que mira, el grosor del cristal hace un efecto *gafas de sol* con lo que la pintura se ve más tamizada, y más *allí*.
Para dar por acabado el proceso de esta foto tengo que ir quitando estratégicamente con un trapo y disolvente algunos contornos que me han salido demasiado bien -siempre pinto de más-, con la idea de que la vegetación quede un poco más rota, más a medio hacer, como en descomposición.
Ibiza no sería la misma sin la amistad de Ana María Cabello Fuentes -gracias-, quien después del trabajo me enseña esa otra isla desconocida para el turista. La foto está tomada en Can Pilot, restaurante del pueblo de San Rafael, conocido por su excelente hamburguesa de buey.
Aquí es donde irá una parte del mural.
Terminado. Su ubicación definitiva será el vestidor del spa, separado 5cm de la pared para que la sombra que arroje la pintura forme parte de la composición. El tono beige del sitio hará de fondo a través del cristal. Sin título. Óleo / vídrio - 400 x 90 cm. Miguel Gómez Losada 2012
Playa de Talamanca, anocheciendo. No hago otra cosa más que observar a ese hombre. Después leo un párrafo de Matthiew Ricard que me produce un profundo desasosiego: "... ¿es necesario continuar incrementando las posesiones si ya se vive holgadamente? Cuando disponemos de tiempo libre, ¿qué hacemos? ¿Es urgente cambiar las lámparas, pintar las contraventanas verdes de marrón, plantar de cien maneras el jardín? Es realmente indispensable ir de compras hasta acabar agotado, cambiar de coche cada tres años? tener más objetos, más ropa, ..." Cierro el libro y vuelvo a mirar al hombre, sigue ahí, creo que mira un pez, siento afinidad por los dos y me alegro al darme cuenta de qué es lo que quiero. [2.4.2012]
La salinera de Ibiza, un sitio que tiene algo de fiordo y de albufera. Qué suerte descubrirla en tiempo lluvioso.
Ahí sigue Asia, el mural de papel. Han pasado doce años desde que lo presenté en la Diputación de Córdoba. Contiene unidades de papel de mi padre y mías. Es un asunto familiar.